Es ahora o nunca. Del precio que pagué por kilo en septiembre, a principio de la temporada otoñal de níscalos, a como están esta semana en el mercado, hay una diferencia abismal!
Esta semana es el momento de comprar níscalos y hacer un guisote con patatas, que hace frío. Recuerda que las setas se deben limpiar sólo con un trapo húmedo, pero si te da un poco de grima como a mí, límpialas primero concienzudamente con el trapo y luego las pones lo menos posible bajo un chorrito de agua, para asegurarte que no les queda ningún resto de tierra u hojas.
Ingredientes para 3 personas
1/2 kilo de níscalos troceados
4 patatas gallegas, medianas, peladas y cortadas en trozos irregulares
1 cebolla picada
1 pimiento picado
1 zanahoria picada
1 ajo picado
1 litro de caldo de verduras o en su defecto, de agua.
Aceite para el sofrito (unas cinco cucharadas)
Una cucharada de eneldo
Sal al gusto
Esta receta es la básica, pero también admite otras verduras que tengas por casa, como un trozo de puerro, de calabaza, perejil, una hoja de laurel...
No tiene ningún misterio, en una cazuela se calienta el aceite a fuego medio y se hace un sofrito con la cebolla, el pimiento, la zanahoria y el ajo picados. Cuando la cebolla y el pimiento cambien de color, se añaden los níscalos limpios y troceados y se sofríen unos minutos. Cuando empiezan a soltar líquido, se añaden las patatas, la sal y el eneldo. Como siempre que hacemos un guiso con patatas, no se cortan perfectas sino que se "chascan" con el cuchillo para que suelten almidón. Una vez que se rehoga un poco todo (unos cinco minutos más) y se evapora el líquido que sueltan las setas, se añade caldo o agua hasta que lo cubra.
Esta cazuela la ponemos al mínimo, para que se vaya haciendo poco a poco el guiso, hasta que las patatas estén listas, de media hora a tres cuartos, aunque depende del tipo de patata. Antes de servir, probamos las patatas que estén blandas.
Una vez en el plato, en casa solemos aplastar algunas patatas para que quede aún más espeso, pero claro, ya no queda tan fotogénico.
Las shice y me relamí los bigotes. Solo que: yo lavé y lavé los níscalos poniéndolos en un bol con agua, y tras tres veses de lavar-escurrir todavía seguían soltando tierrilla... ¿qué les pasa a mis níscalos, dotor?
ReplyDeleteSaludos de una atmiradora